Historia de la Iglesia Rusa

Historia de la Iglesia de Rusia
La Iglesia Ortodoxa Rusa tiene una antigüedad de mas de mil años. Según la tradición, San Andrés, el primer apóstol llamado por Nuestro Señor Jesucristo, fue quien desde las colinas de Kiev bendijo la fundación de aquella ciudad. El fue quien predicó el Evangelio en aquellas lejanas tierras.
Hacia finales del siglo X, según una antigua leyenda, el Gran Príncipe Vladimir de Kiev, envió delegaciones a distintas regiones del mundo con el fin de examinar las religiones que allí se profesaban a fin de decidir cual era la más apropiada para su Reino; cuando los delegados regresaron, le recomendaron a Vladimir la Fe profesada por los griegos, ya que asistiendo a un servicio litúrgico en la Catedral de Santa Sofía, en Constantinopla, “nosotros no sabíamos si estábamos en el Cielo o en la tierra”. Después del Bautismo del príncipe Vladimir, muchos de sus súbditos se bautizaron en las aguas del río Dnieper en el año 988.
La Princesa Santa Olga de Kiev, es recibida en la Iglesia de Santa Sofía de Constantinopla
De este modo, el cristianismo bizantino, se convirtió en la Fe de los tres pueblos que se originaron a partir de aquel antiguo Reino de la Rus’de Kiev: los Ucranianos, los Rusos y los Bielorrusos.
El cristianismo de la región de Kiev, floreció por algún tiempo, pero luego entró en un período de decadencia que culminaría en el año 1240, cuando la ciudad de Kiev fue arrasada durante la invasión de los mongoles; a consecuencia de esto, la mayoría de la población debió huir hacia el norte.
En el siglo XIV, un nuevo centro de importancia política-religiosa se desarrolló alrededor del Principado de Moscú, y en consecuencia el Metropolitano de Kiev comenzó a residir allí con los años Moscú fue declarada Sede Metropolitana.
Cuando Constantinopla finalmente cayó bajo el yugo turco en 1453, Rusia expulsaba a los mongoles de su territorio, dando comienzo a un pujante Estado Independiente.
A causa de la caída de Roma en la herejía, y de la segunda Roma (Constantinopla) en manos de los turcos islámicos, algunos rusos comenzaron a referirse a Moscú como la “Tercera Roma”, la cual preservaría las tradiciones de la Fe ortodoxa y la civilización romana. El Zar (César) era ahora el nuevo Campeón y Protector de la ortodoxia, del mismo modo que en otro tiempo lo había sido el Emperador Bizantino. La Iglesia Ortodoxa Rusa en este tiempo ya había comenzado a desarrollar su propio estilo de iconografía, de arquitectura sacra, así como también, sus propias tradiciones espirituales, teológicas y litúrgicas.
A mediados del siglo XVII, un cisma de considerable importancia tuvo lugar en el seno de la Iglesia Rusa, cuando el Patriarca Nikón reformó los numerosos usos litúrgicos locales a fin de hacerlos mas adecuados a los usos griegos. Aquellos ortodoxos que rechazaron someterse a la reforma e insistieron en continuar con sus antiguas tradiciones litúrgicas comenzaron a ser conocidos bajo el nombre de Vétero Creyentes. (En la actualidad hay algunas comunidades de vétero-creyentes dependientes del Patriarcado de Moscú, y otros que están bajo la Iglesia Rusa Fuera de Rusia).
El Patriarcado Ortodoxo Ruso fue oficialmente establecido por el Patriarca Ecuménico Jeremías II en 1589, pero sería abolido por el Zar Pedro el Grande en el año 1721; desde esa época hasta San Nicolás II, la Iglesia Rusa fue administrada por un Santo Sínodo bajo la estricta supervisión del Estado; pero pese a este manejo tan secular de la Iglesia, hubo en el siglo XIX un fuerte resurgimiento del conocimiento teológico, de la espiritualidad y del monaquismo en toda Rusia.
En Agosto de 1917, después de la abdicación del Zar, poco antes de la Revolución Bolchevique de Octubre, el Gran Concilio Local de la Iglesia Rusa se reunió en Moscú, dónde decidieron restaurar el Patriarcado, eligiendo al Metropolitano Tíjon de Moscú para ocupar dicho cargo; sin embargo, un período de sombras se cernía sobre esta Iglesia, y ya antes de concluir el Sínodo, se informó a los presentes que el Metropolitano de Kiev había sido asesinado, dándose comienzo a las persecuciones y martirios que sufriría esta Iglesia por siete décadas.
El Gran Concilio de Toda Rusia, presidido por el Santo Patriarca Tíjon
El Santo Patriarca Tíjon fue un sincero crítico del comunismo en sus primeros años como Patriarca, pero debió moderar sus afirmaciones públicas frente al brutal Régimen luego de haber pasado un año en prisión. Tras su muerte, y con su sucesor, el Metropolitano Sergio, se forjó un “modus vivendi” con el régimen soviético, el cual fue seguido a lo largo de siete décadas, sobre la base de que la Iglesia apoyaría públicamente al régimen en todos sus asuntos, y el Estado autorizaría el accionar de la Iglesia, aunque en una esfera muy reducida, limitando grandemente cualquier manifestación religiosa (litúrgica). A esta particular relación entre la Iglesia y el Estado Comunista se la denominó bajo el nombre de “Sergianismo”.
La persecución religiosa en la Unión Soviética tomó formas diferentes en períodos diferentes; virtualmente todos los teólogos y demás líderes de la Iglesia Ortodoxa Rusa fueron exilados durante la década del 20, o ejecutados en la década del 30. Para darnos una idea cabal de la tragedia sufrida por esta Iglesia, basta con mencionar que sólo en el año 1937 fueron arrestados unos 136.000 clérigos, de los cuales 85.000 fueron asesinados. En el período comprendido entre los años 1917 a 1939, entre el 80 y 85% de los clérigos de la época pre-revolucionaria desaparecieron; sin embargo las cosas mejorarían un poco durante el desarrollo de la II Guerra Mundial, y en los años posteriores al gobierno de Stalin, hasta que en 1959 Khrushchev comenzó a intensificar la persecución. En este estado de cosas, los Obispos exiliados en Yugoslavia crean la Iglesia Ortodoxa Rusa del Exterior (ROCOR), la cual trata de mantener la organización y vida eclesiástica fuera de los límites soviéticos; más tarde el Sínodo de Obispos de la ROCOR se traslada a Munich, y luego a Nueva York.
Muchos templos fueron cerrados o destruídos luego de la Revolución de 1917, y otros tantos fueron cerrados durante la segunda oleada de clausuras de iglesias bajo el período Khrushchev (1959-1962). Mientras en el año 1917 la Iglesia contaba con 77.767 iglesias (entre parroquias y monasterios), en la década del 70' quedaron tan solo unas 6.800 aprox. El número de Monasterios que en el año 1914 era de 1.498, cayó a tan solo 12 casas, y de los 57 seminarios teológicos que operaban en Rusia en 1914, fueron reducidos a tres, que funcionaban en las ciudades de Moscú, Leningrado (San Petersburgo) y Odessa. Después de 1988, gracias a las reformas del Presidente Gorbachov, la situación de esta sufrida Iglesia mejoró radicalmente, cuando las persecusiones cesaron, los templos empezaron a reabrirse y la Iglesia pudo recuperar buena parte de su posición en la sociedad.

Su Santidad el Patriarca Kiril de Moscú y Toda Rusia
El 27 de Octubre de 1990, el Concilio de Obispos de la Iglesia Ortodoxa Rusa, abolió el Exarcado de Ucrania, y otorgó la “Independencia y auto-gobierno” a dicha Iglesia, si bien ello no logró evitar un cisma dentro de la Iglesia Ucraniana. Problemas jurisdiccionales han aparecido en la República de Moldavia (antigua Besarabia) y en Estonia, donde existen jerarquías paralelas a la del Patriarcado de Moscú.
En Mayo de 2007, el Patriarcado de Moscú y la Iglesia en el Exterior (ROCOR) se reconcilian, después de muchos años de desconfianzas y hostilidades; y en virtud del "Acta de Comunión Canónica", la ROCOR pasa a ser una Iglesia semi-Autónoma de la Iglesia Rusa Local.
El actual Primer Jerarca es Su Santidad Kiril, Patriarca de Moscú y Toda Rusia
Tomado y modificado a partir de lo publicado en los sitios web:www.geocities.com/pro_ortodoxia/index.html ymx.geocities.com/iglesiaortmex/esp
Las fotografías están tomadas de distintos sitios web.
La Iglesia Rusa Hoy

La Iglesia Ortodoxa Rusa es una Iglesia Autocéfala Local multinacional, que se encuentra en unidad doctrinal y comunión canónica con las otras Iglesias Ortodoxas Locales.
Hoy en la Iglesia Rusa hay 157 diócesis, alrededor de 29.263 parroquias y más de 800 monasterios. El servicio pastoral es realizado por 217 obispos, 27.200 sacerdotes y 3.450 diáconos. Hay 5 academias teológicas, 38 seminarios mayores y 29 pre-seminarios. la Iglesia cuenta también con 3 universidades Ortodoxas, 2 Institutos Teológicos, un pre-seminario femenino, y 28 escuelas de iconógrafos. El número total de estudiantes de teología, tanto hombres como mujeres, es de más de 6000.
En cuanto a su organización interna, la máxima autoridad dentro de la Iglesia Ortodoxa Rusa es el Concilio Local, el cual se compone de obispos, clérigos y laicos que se congregan periódicamente. De modo habitual, la administración de la Iglesia es conducida por el Santo Sínodo, compuesto por el Patriarca y seis obispos diocesanos, de los cuales tres son permanentes, y los otros tres temporarios. El Concilio de Obispos, el cual reúne a la totalidad del episcopado, incluyendo también a las cabezas del Santo Sínodo y a los rectores de las academias teológicas y seminarios, es convocado cada dos años aproximadamente.
Fuente: Departamento de Relaciones Exteriores Eclesiásticas del Patriarcado de Moscú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario